miércoles, 27 de enero de 2010

Calle Tomás de Cózar








Al igual que lo comentado en la entrada anterior con respecto a la Judería, la calle Tomás de Cózar entró hace ya décadas en un proceso de degradación que ha desembocado en su práctica destrucción.

La vía conserva el trazado irregular de época medieval (que bordeaba parte del recorrido de la muralla) y mantenía algunos edificios del siglo XVIII, de los cuales prácticamente sólo se conserva uno que gracias a la iniciativa privada -que instaló en él unos baños árabes-, lo rehabilitó junto con las interesantísimas pinturas murales que decoran sus muros.

Aunque en un estado lamentable, la vía conservaba gran parte de los inmuebles que la jalonaban. Sin embargo (y con la aprobación municipal) en los últimos dos años se ha derribado lo poco que quedaba dejando un panorama desolador. ¿De qué sirve una actuación en el acerado cuando ya se ha perdido la esencia de la calle? Aquí les dejo algunas imágenes (algunas antiguas) de la calle.

Al menos podemos felicitarnos de que en la vecina calle Medina Conde, se esté
rehabilitando un edificio del siglo XVIII para instalar viviendas respetando la organización interna del inmueble.

Iniciativas de este tipo se necesitan con urgencia en una ciudad tan castigada por la especulación. Os recomiendo este blog donde hay dos vídeos de esta calle, en ellos se puede observar un torreón mudéjar que "asoma" entre la destrucción de un solar, a la espera de ser rehabilitado o que la desidia se cebe con él hasta que se derrumbe.

http://www.farfanestella.es/wordpress/?tag=malaga

martes, 26 de enero de 2010

Torreón mudéjar y Judería









Este antiguo torreón pese a ser de estilo mudéjar fue construido durante la época barroca, más de un siglo después de la construcción de la cercana torre mudéjar de la iglesia de Santiago. Ello nos habla de la coexistencia de tradiciones constructivas a lo largo del tiempo en nuestra ciudad.

Su situación en una de las arterias principales de la Málaga en la Edad Moderna (la antigua calle Real –hoy de Granada-, a través de la cual los Reyes Católicos hicieron su entrada triunfal tras la conquista cristiana del 19 de Agosto de 1487) hace de este edificio un lugar singular en el actual entramado urbano.
Hasta la destrucción de la zona por parte del Ayuntamiento desde el año 2004 (en el contexto del plan de intervención sobre la Judería), el entorno guardaba características propias de la ciudad medieval. Así se eliminaron los adarves (calles sin salida de tradición islámica) que se encontraban junto al torreón y se procedió a la comunicación entre las calles Granada y Alcazabilla con la apertura de una nueva plaza (plaza de la Nieve) y la construcción de una sinagoga y Museo Sefardí. Ante estas actuaciones cabe preguntarse si es necesario reinventar un pasado a costa de destruir lo poco que quedaba de la judería.

En cuanto al torreón propiamente dicho, fue despojado de todo el edificio en el que estaba inserto, se le derribó una fachada y se “hormigonó” todo su interior dejando un gran ventanal lateral que altera sustancialmente el edificio original. Además la torre ha perdido la estructura de madera que sustentaba el tejado, en definitiva podemos hablar de un atentado contra el corazón de la ciudad con la práctica destrucción de la judería, aquellas calles que allá por el siglo XI vieron nacer al filósofo y poeta Ibn Gabirol.

En las imágenes pueden ver una visión actual del torreón mudéjar, junto con otras dos de las obras y una de la primera mitad del siglo XX.

viernes, 8 de enero de 2010

Casa de Pedro de Mena











La casa de Pedro de Mena (espacio que también albergó su taller) es uno de los edificios más antiguos de la ciudad hasta la "salvaje" reconstrucción que el Ayuntamiento ha llevado con la intención de instalar entre sus muros el Museo de Ravello de Toro.

El edificio fue construido en el siglo XVII en estilo barroco civil. En este lugar se instaló el imaginero granadino Pedro de Mena y Medrano tras trasladarse a Málaga para ejecutar la sillería del coro de la catedral, y en esta casa vivió hasta su muerte en 1688.

Durante los años 80 del pasado siglo fue rehabilitado (conservándose gran parte de los elementos originales del edificio), y se abrió el famoso Café-Teatro, lugar asiduo de la cultura malacitana de la época.

Tras ser adquirido por el Ayuntamiento de la ciudad, hubo quien propuso crear en este lugar el Centro de Interpretación del Barroco local, o una Casa-Museo de su ilustre morador. Sin embargo el Consistorio se empecinó en alojar la colección que el artista contemporáneo Félix Ravello de Toro donó a la ciudad. De nada sirvieron las voces que pedían instalar esta colección en el Hospital Noble (edificio a todos los efectos más amplio e idóneo).
Así se empezó a "rehabilitar" la casa de Pedro de Mena, lo cual no fue otra cosa que la demolición de la mayor parte del edificio excepto la fachada principal (con la pérdida de elementos originales), todo bajo la manida excusa de que el inmueble era irrecuperable, inmueble que además contaba con el grado de protección integral (Diario Sur, 22/05/2008).

Todo esto no deja de ser un auténtico escándalo y menosprecio por el patrimonio local.

En las imágenes pueden observar una vista del edificio en 2005, otra del patio del mismo en una imagen antigua y otra tras las obras llevadas a cabo recientemente.